La idea consiste en una plataforma de alquiler de bicicletas capaces de almacenar la energía cinética que luego aprovecharían los autobuses eléctricos o híbridos urbanos. Los usuarios recogen la bicicleta en el punto de estacionamiento y, al devolverla, se descarga la energía en una red inteligente. Los ciudadanos que devuelven cargada la bicicleta reciben créditos para su próximo pase de autobús. Las bicicletas podrían llevar placas solares y un sistema de identificación electrónico para evitar su robo.
El movimiento de las ruedas también puede aprovecharse para dar luz y evitar el uso de las contaminantes pilas. Magtenlight propone una versión más moderna y mejorada de la clásica dinamo. El sistema se basa en el magnetismo y, por tanto, no fricciona ni frena a la rueda, a la vez que proporciona una iluminación más intensa. El aparato provee de energía incluso cuatro minutos después de estar detenida la bicicleta, para iluminar una luz de posicionamiento.
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